martes, 15 de noviembre de 2005

El Gigante sonriente

Hasta hace unos años, la idea que teniamos de China se circunscribia a los rollitos de primavera, el arroz tres delicias, pollo con almendras, cerdo agridulce y helado con nueces cantonesas. Despues fueron las tiendas de 0,60 euros..
Tendemos a ser reducionistas y no ver mas alla que lo que nuestros ojos pueden tocar con la mirada. Si, nos sonaba algo de China, de Mao, de la Gran Muralla. Estereotipos similares a los que de nosotros tienen en otros lugares: Toros, flamenco y paella.
Esa vision que teniamos, se interrumpio hace unos meses, cuando las noticias nos alertaban de que la ropa y el calzado chino invadia occidente a precios bajisismos y eso -como el cerdo- suponia una sensacion agridulce por el ahorro para el consumidor y el declive de los industriales locales.
Ya anteriormente, escribia en estas paginas, que la mirada a China debiera ser no solo de invasor, sino de cliente. Son muchos millones de chinos, cada vez mas prosperos economicamente y consecuentemente con mas deseos de comprar.
Desde epocas lejanas, los paises han practicado el intercambio comercial y ahora no iba a ser una excepcion.
Acaba de visitarnos el Presidente de China y durante la visita se han sellado varios acuerdos comerciales entre España y China. Ademas, se han acordado politicas de cooperacion, que nos situa en un lugar privilegiado junto al pais oriental.
Hay mucho que intercambiar, no solo productos comerciales, sino cultura, arte, filosofia, etc.
Vamos avanzando en un mundo mejor. Esto es obra de todos, pero los que estan en mejor disposicion de ofrecer, son los que tienen que tender puentes a los menos privilegiados. Quizas esa sea una manera de ir eliminando los desplazamientos de emigrantes, los desordenes callejeros, e incluso, las elecciones de lideres impresentables.
Decia estos dias una periodista china que acompañaba a la delegacion de sus pais, que lo que no gustaba a los chinos era la crispacion. Los chinos -decia- charlaran lo que haga falta para llegar a acuerdos, y siempre con una sonrisa. Nos queda mucho por aprender de su sabiduria.
Señor Jintao, me hubiese gustado saber chino para haberle enviado directamente un saludo a usted y a su pueblo, pero mi incultura idiomatica, tan solo me permite utilizar un truco informatico para desearles un mensaje de PAZ.

LA WEB NUESTRA DE CADA DIA: Greenpeace Japan CyberactionAlas de Paz
Vamos de China a Japon, aunque quizas seria mejor decir que volamos por todo el planeta. Esta es una web de Greenpace Japon, que alberga un proyecto que se hizo realidad el Agosto pasado. Miles de personas, escribieron en la web un mensaje de Paz y estos fueron escritos en tarjetas que se adhirieron a globos. Los globos se soltaron en el 60 aniversario del ataque a la ciudad japonesa de Hiroshima, en dicha ciudad.

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