No recuerdo claramente cuando fue la primera vez que vi a mi sobrino Toni, quizas fuera en Barcelona, casi al poco tiempo de formar parte de su familia. Luego vendrian muchos dias de convivencia en su casa y sobre todo en el pueblo. Recuerdo las peliculas veraniegas con la participacion de todo el elenco sobrinal, rodando hasta los rincones mas escondidos de la casa de la abuela.
Han sido muchos momentos maravillosos, en los cuales he participado como uno mas de la pandilla, a pesar de que por edad, deberia de haber sido el tio Porreta, contador de batallitas. Me cuesta escribir estas lineas, lo mismo que estos dias pasados desde que nos abandonastes. La tristeza, me produce una sensacion de abatimiento, que pone en blanco mi mente, cuando me siento delante del ordenador. Quisiera, como me enseño mi hermana, agradecer el tiempo que he podido disfrutar de tu compañia y de tu cariño, pero aun asi, el vacio me ralentiza el corazon y las palabras.
Te fuiste para volar entre los riscos de Monserrat, alli sabremos que estas en la parte mas fisica de tu ser, pero siempre permaneceras mas cerca, en mi corazon. Un beso Toni.
Toni
Como siempre, sólo puedo ofrecerte un abrazo en la distancia ante este dolor.
ResponderEliminarSoy de los que cree que algún día podremos todos encontrarnos y ser felices en los riscos de Monserrat, poco consuelo tal vez, pero es lo que dicta mi corazón.
Un abrazo,
Federico