Me encantaria leer los relatos que escribiera en estos momentos, Don Francisco de Quevedo y Villegas. Desde luego, a falta de uso de duelos a espada, tendria Don Francisco, abono anual honorario en los tribunales, pero seguro que su defensa en boca de El mismo, lograria dejarlo libre y alabado.
Pero volvamos al relato que nos ocupaba al principio. La vida del Buscon, llamado Don Pablos, me quedo grabada por un pasaje breve pero jugoso. Bueno, otrora jugoso. El licenciado Cabra, preparaba la olla para la comida y la preparaba a conciencia:
"Y así, tenía una caja de hierro, toda agujerada como salvadera, abríala y metía un pedazo de tocino en ella que la llenase y tornábala a cerrar y metíala colgando de un cordel en la olla, para que la diese algún zumo por los agujeros y quedase para otro día el tocino. Parecióle después que en esto se gastaba mucho, y dio en sólo asomar el tocino a la olla. Dábase la olla por entendida del tocino y nosotros comíamos algunas sospechas de pernil. Pasábamoslo con estas cosas como se puede imaginar. "
Me pregunto cuan rancio estaria el tocino de cerdo, despues de tanto sumergirse en la olla. Y estaba en estas, uniendo rancio y cerdo, cuando, llegome la noticia sonora del Presidente del PePe canario, donde, sale con las lindezas de que "cuando el PSOE cuando ha tenido que matar, ha matado...".
Evidentemente, cuando el jabali se ve acosado, muere matando.
LA WEB NUESTRA DE CADA DIA: Directo al paladar
Tanto se me han excitado los jugos gastricos, no se si por la olla que se cuece, o por la olla que se va, que he tenido que refugiarme en esta pagina, para saborear, aunque sea a nivel lector y visualizador, de las exquisiteces que la vida nos pone a disposicion. Muy alejadas algunas de ellas, pero arrimando el ascua otra vez a la literatura del Siglo de Oro, diremos suspirando: "Los sueños, sueños son".
MAS QUE MIL PALABRAS: Photos by Pansa Sunavee
Duo for power 02 
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