Adivina, quien puede llamar al programa, esta tarde...

Sin duda, la estrella mediática del pasado miércoles, fue el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez.
A su prevista aparición nocturna el El Hormiguero, se añadió 'sorpresivamente', su llamada al programa "Sálvame" de Telecinco.
No he visto ni oído, ninguna de sus apariciones. Personalmente, no me cae bien. Creo que es mas de lo mismo, eso si, aderezado de guapura, labia y puesta en escena mejor cuidada que sus antecesores.
No es que no me caiga bien por lo dicho anteriormente, sino precisamente por parte de lo que va diciendo. Sobre todo, por esa fijación contra Podemos, que creo no beneficia en nada a la izquierda: el enemigo no es Podemos (aunque a estos también hay que darles un repase, por su prepotencia y descalificación de todo lo que no es ellos).
Independientemente de mis gustos o disgustos políticos, la entrada en escena de Pedro Sánchez en programas de entretenimiento y despelleje (bueno, las tertulias políticas, también llevan una buena dosis de ello), le habrá reportado bastantes simpatías entre unos televidentes, que en su mayoría, no serán asiduos de dichas tertulias políticas. Quizás muchos, lo habrán conocido ayer por primera vez y sin duda, servirá para que mas adelante recuerden al 'chico simpático' del PSOE, cuando llamen a las urnas. Parece una tontería, pero repasen la gente que iba a los programas de Hermida y verán su escalada política.

Espero, que esa disposición a participar en programas diversos de televisión, se mantenga en el futuro, tanto en la frecuencia ante los medios, como en la disposición de contestar preguntas a los periodistas. A ver si se acaban de una vez por todas las ruedas de prensa sin preguntas y los comunicados vía plasma. Esto, para todos los personajes públicos, sobre todo los políticos.

No me dolerán prendas rectificar mi apreciación sobre el líder del PSOE, si alguna vez me convence de lo contrario.